Mi madre me dice que no lloré ningún día pues ella me decía que iba al cole de los mayores y eso que tan solo teníamos tres años, yo iba muy contenta por eso.Yo recuerdo que jugaba a la arena con mis amigos y todos los días traía arena en los bolsillos del babi y el único inconveniente que yo recuerdo es que quería jugar con el agua en la fuente pero no llegaba.Cuando llegué a primaria, donde estamos ahora, comencé el curso un poco más nerviosa porque había niños más grandes que yo, pero a medida que pasaba el tiempo y comenzaba a tener más amigos, se me fueron los nervios.
Ahora conozco a muchos niños y ya no me da tanta vergüenza.
Mariángeles me ha gustado mucho tu opinión sobre el libro que mas te gusta. ¡¡ENHORABUENA!!
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